jueves, 17 de junio de 2010
lunes, 14 de junio de 2010
domingo, 13 de junio de 2010
Cómo ayudar a su hijo a aprender a leer UNA GUÍA PARA PADRES DE FAMILIA DEL PREESCOLAR AL TERCER GRADO
La Lectura es lo Primero
Cuando los niños leen bien en los primeros grados, es más probable que aumenten su
capacidad de aprendizaje durante y aun después de los años escolares.
Aprender a leer es una tarea difícil para los niños. Afortunadamente, investigaciones recientes indican
cómo podemos ofrecer a cada niño un buen comienzo con la lectura.
El aprender a leer bien implica el desarrollo de habilidades importantes, entre las cuales están:
● usar el idioma en conversación
● escuchar y responder a las historias que se leen en voz alta
● reconocer y nombrar las letras del alfabeto
● escuchar los sonidos de la lengua hablada
● conectar los sonidos a las letras para descifrar el “código” de la lectura
● leer a menudo de tal manera que los sonidos se reconozcan fácil y
automáticamente
● aprender y usar nuevas palabras
● comprender lo que se ha leído
Los maestros de preescolar y kindergarten preparan el camino para que su hijo aprenda a leer, usando
desde el comienzo ciertas habilidades necesarias. Los maestros de primero, segundo y tercer grado
tienen la tarea de desarrollar las destrezas que los niños van a utilizar todos los días por el resto de sus
vidas. Como padre de familia, usted puede ayudar a su hijo, entendiendo lo que los maestros le están
enseñando e informándose acerca del progreso de su hijo y del programa de lectura que se está
llevando a cabo en la clase.
Usted también puede ayudar a su hijo a convertirse en un buen lector. Aprender a leer requiere mucha
práctica,mucha más práctica de la que los niños tienen durante el día en la escuela. Este folleto describe
cómo debe ser un buen programa de lectura en la escuela y cómo usted puede apoyar este programa
por medio de las actividades que lleva a cabo con sus hijos.
El éxito escolar comienza con la lectura
Aprender a leer y a escribir en inglés es una de las destrezas más
importantes que su niño va a adquirir en la escuela. No importa si
usted habla inglés o español o ambos idiomas, gran parte del
aprendizaje de la lectura puede llevarse a cabo en el hogar. Las
actividades incluidas en este folleto fueron diseñadas para que
todos los padres de familia ayuden a sus hijos en el hogar.
Estas ideas prácticas son el resultado de investigaciones que
indican la manera en que los padres de familia y los maestros les
pueden ayudar a los niños a aprender a leer. Lo invitamos a que
participe activamente en la educación de su hijo y haga estos
ejercicios de lectura en el hogar.
En la escuela usted debe ver que los profesores…
●Enseñen los sonidos del idioma. Los maestros ofrecen a los niños la oportunidad de
practicar los sonidos que componen las palabras. Los niños aprenden a agrupar los sonidos
para componer palabras y a separar las palabras en cada uno de los sonidos.
●Enseñen las letras del alfabeto. Los maestros les ayudan a los niños a reconocer el nombre
y la forma de cada una de las letras.
●Ayuden a los niños a aprender y a utilizar palabras nuevas.
●Lean a los niños todos los días. Los maestros leen con expresividad y hablan con los niños
sobre lo que están leyendo.
Usted puede ayudar en el hogar…
● Practicando los sonidos de la lengua.
Lea libros de versos y rimas. Enseñe a sus
hijos rimas, poemas cortos y canciones.
Haga juegos de palabras fáciles, como
¿Cuántas palabras puedes formar que
suenen como la palabra “bat”?
● Ayudándole a su hijo a separar
los sonidos que forman las palabras
oralmente y luego a unirlos de
nuevo. Ayude a su hijo a separar los
sonidos de las palabras, a escuchar los
sonidos del comienzo y del final y a
agrupar los sonidos que ha separado.
● Practicando el alfabeto,
señalando las letras donde las vea
y leyendo libros que enseñen el
alfabeto.
Si su hijo apenas está
empezando a aprender a leer
En la escuela usted debe ver que los profesores…
●Enseñen la fónetica sistemáticamente señalando cómo están relacionados los sonidos
y las letras.
●Ofrezcan a los niños la oportunidad de practicar la relación entre la letra y el sonido
que están aprendiendo. Los niños deben tener la oportunidad de practicar los sonidos y las
letras leyendo libros fáciles que utilicen palabras con la relación entre letra y sonido que están
aprendiendo.
●Ayuden a los niños a escribir las relaciones entre letra y sonido que saben, usándolas
en palabras, frases, mensajes y en sus propios relatos.
●Muestren a los niños diferentes maneras de pensar sobre lo que están leyendo y de
entender el contenido. Los maestros
deben hacerles preguntas a los niños para
mostrarles las diferentes formas de
comprender el significado de lo que
están leyendo.
Usted puede ayudar en
el hogar…
●Señalando la relación entre
letra y sonido que su hijo
está aprendiendo cuando
la vea en etiquetas, cajas,
periódicos, revistas y
letreros.
●Escuchando a su hijo leer
las palabras y los libros
que trae de la ecuela.
Sea paciente y escuche
mientras su hijo practica.
Demuéstrele lo orgulloso
que está de su progreso en la lectura.
Si su hijo apenas está
empezando a leer
En la escuela usted debe ver que los profesores…
●Continúen enseñando la relación letra-sonido a los niños que necesiten más práctica.
Los niños necesitan un promedio de dos años de instrucción para aprender la relación
letra-sonido y para aprender a deletrear y a leer bien.
●Enseñen el significado de las palabras, especialmente las palabras que son importantes
para entender un libro.
●Enseñen diferentes maneras de aprender el significado de nuevas palabras. Puesto que
los maestros no pueden enseñar a los estudiantes el significado de todas las palabras que ellos
ven o leen, se les debe enseñar a usar el diccionario para aclarar el significado de las palabras.
Se les debe enseñar a utilizar las palabras conocidas y las partes de una palabra para deducir
el significado de otras y a utilizar el contexto de la oración para deducir el significado de una
palabra.
●Ayuden a los niños a entender lo que ellos están leyendo. Los niños que saben leer bien
piensan mientras leen y saben si lo que están leyendo tiene sentido. Los maestros les ayudan a
los estudiantes a comprobar si entienden lo que están leyendo. Cuando los niños tienen alguna
dificultad, el profesor les enseña las maneras de averiguar el significado de lo que están leyendo.
Usted puede ayudar en el hogar…
●Leyendo varias veces los libros conocidos. Los niños necesitan practicar la lectura con
comodidad y deben leer con expresión los libros que ya conocen.
●Fomentando la precisión de la lectura. Mientras su hijo lee en voz alta, señálele las palabras
mal leídas y ayúdele a leerlas correctamente. Si usted interrumpe la lectura para concentrarse
en una palabra, haga que su hijo lea nuevamente toda la oración para asegurarse de que
entiende el significado de lo que lee.
●Mejorando la comprensión de la lectura. Hable con su hijo acerca de lo que está leyendo.
Hágale preguntas sobre las palabras nuevas y sobre lo que ha pasado en el cuento. Hágale
preguntas sobre los personajes, lugares y acontecimientos. Pregúntele qué aprendió en el libro
que acaba de leer. Anime a su hijo a que lea por su propia cuenta.
La lectura es lo primero
Cómo ayudar a su niño a aprender a leer
Consorcio para la Lectura
Este folleto fue publicado por el Consorcio para la Lectura (The Partnership for Reading), con la
colaboración de El Instituto Nacional de Alfabetización (NIFL siglas en inglés), el Instituto Nacional de Salud
Infantil y Desarrollo Humano (NICHD siglas en inglés), el Departamento de Educación de los Estados
Unidos, y el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos con el objetivo de ofrecer
las investigaciones sobre la lectura a la disposición de educadores, padres de familia, legisladores y otros
interesados en ayudar a las personas a leer bien.
La Corporación de Investigación RMC (RMC Research Corporation) desarrolló este folleto con fondos
provenientes del Instituto Nacional de Alfabetización bajo el contrato número ED-00-CO-0093. Los
comentarios y las conclusiones no necesariamente representan el punto de vista o la política del NIFL,
NICHD, o del Departamento de Educación y tampoco se debe suponer el endoso del gobierno federal.
www. El Instituto Nacional de Alfabetización
El Instituto Nacional de Alfabetización es una organización federal independiente que apoya el desarrollo de
servicios de alfabetización de alta calidad a nivel estatal, regional y nacional para que todos los americanos
puedan desarrollar las destrezas necesarias para el éxito en el trabajo, en el hogar y en la comunidad. El
Instituto Nacional de Alfabetización administra el Consorcio para la Lectura y otros programas que
promueven la alfabetización de niños y adultos. Para más información sobre el NIFL y la lectura, visite la red
www.nifl.gov.
Para recibir una copia del reporte Teaching Children to Read (disponible solamente en inglés) preparado por
el Panel Nacional de Lectura (National Reading Panel), que sirvió de base para la información incluida en este
folleto, visite la red www.nationalreadingpanel.org.
Para obtener copias adicionales de este folleto, comuníquese con el Instituto Nacional de Alfabetización a la
dirección: ED Pubs, PO Box 1398, Jessup, MD 20794-1398;Teléfono: 1-800-228-8813. Fax: (301) 470-1244.
Correo electrónico: edpubs@inet.ed.gov. También puede tener acceso al documento en la red
nifl.gov.
lunes, 7 de junio de 2010
El pájaro miarro
Este otro cuento ocurrió también en los campos de mi pueblo y es un cuento más de zorras y pájaros que no sé yo muy bien por qué, pero no acaban de ser amigos nunca.
Y es que la zorra gusta de comerse cuanto pajarito alcanza a cazar y estos pajaritos tienen buen cuidado en ponerse lejos de la zorra y es que..... menos mal que las zorras no pueden volar porque si no vete tú a saber si quedaría algún pajarito en el mundo que lo pudiese contar.
Pues bien no me entretengo más y cuento ya lo que venido a contar que es el cuento del pájaro miarro que una mañana se despertó helado bajo la escarcha..... Pero no, no era así como comenzaba este cuento.....que os cuento.
Comienza este cuento una mañana muy fría de un invierno, allá en mi pueblo de mucho frío, mientras en viento aúlla a lo lejos y se deja venir un viento gélido que parece que viene del polo. Tantisimo frío hacía que un pajarito amaneció helado bajo la escarcha, tan helado que no podía andar, moverse y mucho menos echar a volar.
En esto que una zorra que vivía cerca se levantó hambrienta y comenzó a olfatear por si encontraba alguna pieza que llevarse a la boca.
Vio al pájaro, se dio cuenta de lo que le pasaba y se acercó.
Sin la menor lástima se dijo:
-¡Ah , que buen desayuno voy a tener esta mañana!
Se disponía a comerse al pajarito cuando éste le suplicó:
-No zorra, no me comas aún, mira que estoy helado y te sentaré mal y te dolerá el estómago. Será mejor que esperes un poco para comerme. Ponme primero al sol que me seque un poquito; después podrás comerme.
Esto hizo la zorra que creyó lo que le dijo el pájaro. Tenía mucha hambre y sólo pensaba en lo que tardaría y en el momento de comérselo.
Paso un rato, el pajarito que ya estaba seco por el lado que le daba el sol le dijo:
-Dame ahora la vuelta para que me seque por el otro lado. Después podrás comerme.
Con cuidado cogió la zorra al pájaro, así lo hizo y le dio la vuelta.
Paso un rato, el pájaro se encontraba ya seco y la zorra más hambrienta a cada momento que pasaba se disponía a comérselo.
Por último- dijo éste- para comerme has de decir bien alto por tres veces:
-Pájaro miarro comí, pájaro miarro comí, pájaro miarro comí.
Eso mismo hizo la zorra deseando como estaba de comenzar a comer, grito bien alto:
-Pájaro miarro comí, pájaro miarro.....................
Mientras tanto el pajarito ya bien seco echó a volar, voló libre, volaba feliz, más feliz que nunca de ser pájaro, de tener alas, mientras gritaba también el:
-A otro será que no a mí, a otro será que no a.........
Hasta aquí este cuento que me contaron y yo te cuento a ti, para que sepas tú lo que paso aquel año que hizo un invierno tan frío y aquella mañana que la zorra quiso comerse al pobre pajarito, que se había quedado helado bajo la escarcha.
Ángel Gutiérrez Rubio
Popular Puebla de Don Fadrique
Popular Puebla de Don Fadrique
Y es que la zorra gusta de comerse cuanto pajarito alcanza a cazar y estos pajaritos tienen buen cuidado en ponerse lejos de la zorra y es que..... menos mal que las zorras no pueden volar porque si no vete tú a saber si quedaría algún pajarito en el mundo que lo pudiese contar.
Pues bien no me entretengo más y cuento ya lo que venido a contar que es el cuento del pájaro miarro que una mañana se despertó helado bajo la escarcha..... Pero no, no era así como comenzaba este cuento.....que os cuento.
Comienza este cuento una mañana muy fría de un invierno, allá en mi pueblo de mucho frío, mientras en viento aúlla a lo lejos y se deja venir un viento gélido que parece que viene del polo. Tantisimo frío hacía que un pajarito amaneció helado bajo la escarcha, tan helado que no podía andar, moverse y mucho menos echar a volar.
En esto que una zorra que vivía cerca se levantó hambrienta y comenzó a olfatear por si encontraba alguna pieza que llevarse a la boca.
Vio al pájaro, se dio cuenta de lo que le pasaba y se acercó.
Sin la menor lástima se dijo:
-¡Ah , que buen desayuno voy a tener esta mañana!
Se disponía a comerse al pajarito cuando éste le suplicó:
-No zorra, no me comas aún, mira que estoy helado y te sentaré mal y te dolerá el estómago. Será mejor que esperes un poco para comerme. Ponme primero al sol que me seque un poquito; después podrás comerme.
Esto hizo la zorra que creyó lo que le dijo el pájaro. Tenía mucha hambre y sólo pensaba en lo que tardaría y en el momento de comérselo.
Paso un rato, el pajarito que ya estaba seco por el lado que le daba el sol le dijo:
-Dame ahora la vuelta para que me seque por el otro lado. Después podrás comerme.
Con cuidado cogió la zorra al pájaro, así lo hizo y le dio la vuelta.
Paso un rato, el pájaro se encontraba ya seco y la zorra más hambrienta a cada momento que pasaba se disponía a comérselo.
Por último- dijo éste- para comerme has de decir bien alto por tres veces:
-Pájaro miarro comí, pájaro miarro comí, pájaro miarro comí.
Eso mismo hizo la zorra deseando como estaba de comenzar a comer, grito bien alto:
-Pájaro miarro comí, pájaro miarro.....................
Mientras tanto el pajarito ya bien seco echó a volar, voló libre, volaba feliz, más feliz que nunca de ser pájaro, de tener alas, mientras gritaba también el:
-A otro será que no a mí, a otro será que no a.........
Hasta aquí este cuento que me contaron y yo te cuento a ti, para que sepas tú lo que paso aquel año que hizo un invierno tan frío y aquella mañana que la zorra quiso comerse al pobre pajarito, que se había quedado helado bajo la escarcha.
Ángel Gutiérrez Rubio
Popular Puebla de Don Fadrique
Popular Puebla de Don Fadrique
jueves, 22 de abril de 2010
Campanilla de invierno, Galanto, Galantus Galanthus nivalis
- Nombre científico o latino: Galanthus nivalis
- Nombre común o vulgar: Campanilla de invierno, Galanto, Galantus
- Familia: Amaryllidaceae (Amarilidáceas).
- Hábitat: en los bosques de ribera y claros del bosque de hayas entre los 700 y 1400 m.
- Planta bulbosa que forma una mata de 15 cm de altura.
- Hojas lineares y de color verde claro.
- Flores de 2 a 3 cm de un color blanco inmaculado.
- La flor consta de 6 tépalos, 3 externos blancos y 3 internos blancos con una macha verde en el ápice.
- Existen muchas variedades, todas con blancas campanillas péndulas, y también pueden comprarse dobles.
- Una de las más bellas imágenes es la de finales del invierno y principios de la primavera.
- Luz: semisombra.
- Clima fresco.
- Se encuentran mejor en un ambiente de bosque, sobre un suelo de hojarasca.
- Las campanillas de invierno pueden resultar decepcionantes porque necesitan mucho tiempo para arraigar y dar matas grandes.
- Si puede dejar que crezcan libremente.
martes, 6 de abril de 2010
EDITH VERA
El tomate es un rojo
almohadón de seda.
Lo ponen en la mesa,
se queda.
Lo ponen en el plato,
se queda.
Rojo.
Rojo.
De seda.
Se queda.
La le
la lechu
la lechuga va
a ser
una ensa
una ensalada.
La lechuga es el nido
de un pajarito,
que no canta ni pone
ningún huevito.
Con ovillitos de lana
tejeré un bello chal.
Rojos, los primeros puntos.
Azules, los del final.
Sobre el pecho, será fuego.
En la espalda, pavo real.
Un arco iris dormido,
Un sol y granos de sal.
¡Buenas noches, Señor Gato!
¿Qué le apura, adónde va?
-Voy corriendo a ver la luna,
plato de leche en el cielo
plato de vidrio en el mar.
¡Bien que sabes dónde está
la cuevita del ratón”!
Aquí sí.
Aquí no.
Aquí sí.
Donde hay olor a queso.
Donde bailan todos vals.
Donde se corren carreras
y el gato no puede entrar.
En el papel del aire
el verde escribe una flor.
Letra abierta, clara, firme.
La corola dice: Vengo.
El perfume dice: Voy.
El pato Canela
pescaba en la noche
hundiendo su pico
de rojo coral.
Sacaba del agua
pedazos de luna
que él mismo quebraba
a orillas del mar.
Hay cuentos
que pueden ser guardados
en un zapato de niño,
otros en el baúl de viaje de Gulliver
y algunos breves, tan breves,
que caben en el nido de un picaflor.
Nunca hemos visto
Al pajarito
que llama en los naranjos
por la mañana.
¿Tendrá las plumas verdes
y el piquito grisado?
¿Hay alguien que conteste
a su llamado?
Cuatro limones danzan
sobre mi cama.
Siete gorriones saltan
en una rama.
Esto es para mi madre
porque me ama.
En la laguna
se bañan los patos,
las garzas, el martín pescador,
el sol,
la sombra de la paloma
y la luna.
http://elprocedimientodelainfancia.blogspot.com/2007/07/desde-crdoba-la-maga-edith-vera-las.html
almohadón de seda.
Lo ponen en la mesa,
se queda.
Lo ponen en el plato,
se queda.
Rojo.
Rojo.
De seda.
Se queda.
La le
la lechu
la lechuga va
a ser
una ensa
una ensalada.
La lechuga es el nido
de un pajarito,
que no canta ni pone
ningún huevito.
Con ovillitos de lana
tejeré un bello chal.
Rojos, los primeros puntos.
Azules, los del final.
Sobre el pecho, será fuego.
En la espalda, pavo real.
Un arco iris dormido,
Un sol y granos de sal.
¡Buenas noches, Señor Gato!
¿Qué le apura, adónde va?
-Voy corriendo a ver la luna,
plato de leche en el cielo
plato de vidrio en el mar.
¡Bien que sabes dónde está
la cuevita del ratón”!
Aquí sí.
Aquí no.
Aquí sí.
Donde hay olor a queso.
Donde bailan todos vals.
Donde se corren carreras
y el gato no puede entrar.
En el papel del aire
el verde escribe una flor.
Letra abierta, clara, firme.
La corola dice: Vengo.
El perfume dice: Voy.
El pato Canela
pescaba en la noche
hundiendo su pico
de rojo coral.
Sacaba del agua
pedazos de luna
que él mismo quebraba
a orillas del mar.
Hay cuentos
que pueden ser guardados
en un zapato de niño,
otros en el baúl de viaje de Gulliver
y algunos breves, tan breves,
que caben en el nido de un picaflor.
Nunca hemos visto
Al pajarito
que llama en los naranjos
por la mañana.
¿Tendrá las plumas verdes
y el piquito grisado?
¿Hay alguien que conteste
a su llamado?
Cuatro limones danzan
sobre mi cama.
Siete gorriones saltan
en una rama.
Esto es para mi madre
porque me ama.
En la laguna
se bañan los patos,
las garzas, el martín pescador,
el sol,
la sombra de la paloma
y la luna.
http://elprocedimientodelainfancia.blogspot.com/2007/07/desde-crdoba-la-maga-edith-vera-las.html
lunes, 15 de marzo de 2010
La zorra y la paloma
Había una vez una paloma que vivía con sus palominos en un pino. Vivía la paloma feliz y tranquila en el pino con sus palominos; pero un día… pasó por allí una zorra hambrienta y levantó la cabeza hacia el cielo azul de aquel día.
Después se quedó mirando la zorra a la copa del pino y vio a la paloma con sus palominos.
-Paloma, échame uno de tus palominos, dijo la zorra. Échame un palomino, que si no me lo echas con mi rabo rabino corto el pino y te como a ti y a tus palominos.
La paloma, que había visto a la zorra acercarse, cuando oyó lo que decía se asustó; se asustó mucho, muchísimo, y se echó a llorar creyendo lo que decía la zorra.
Estaba la paloma llorando con muchísima tristeza cuando pasó cerca del pino el torcazo y vio a la paloma y viendo que lloraba se le acercó y le preguntó:
-¿Por qué lloras?
-Lloro - respondió la paloma- porque la zorra quiere comerse a mis palominos y comerme a mí también, y ha dicho que tengo que echarle un palomino… y que si no le echo un palomino con su rabo rabino cortará el pino y me comerá a mí y a mis palominos.
-No llores más paloma, no llores más -contestó entonces el torcazo- no creas a la zorra. Tú di que no se corta el pino con su rabo rabino, que se corta con un hacha de acero fino.
Siguió entonces su vuelo el torcazo y la paloma se quedó más tranquila.
Volvió la zorra y volvió a ponerse bajo el pino y con su voz más grave más amenazadora dijo:
-Paloma échame uno de tus palominos, que si no me echas un palomino con mi rabo rabino voy a cortar el pino y te voy a comer a ti y a tus palominos.
-No te lo echaré, no,... -respondió esta vez la paloma-. No te lo voy a echar no, que con tu rabo rabino no se corta el pino, que el pino se corta con un hacha de acero fino.
La zorra se quedo estupefacta, asombrada, turulata, se quedó hecha polvo al ver que había sido descubierta, , que la paloma no le iba a echar ningún palomino.
-¿Quién te lo ha dicho? preguntó. Seguro que ha sido el torcazo dijo la zorra respondiendo ella a su propia pregunta. Y añadió:
-Ya me lo tragaré cuando vaya al charco.
Pasaron los días, la paloma siguió su vida criando a sus palominos y la zorra siguió con sus fechorías por aquí y por allá.
Estaba el torcazo una mañana bebiendo agua en la orilla del charco cuando se le acercó la zorra silenciosa. Silenciosa, muy en silencio, dio un salto tan largo y tan alto que atrapó de un bocado al torcazo. Lo atrapó y se lo quería comer.
-Para tragarme - dijo entonces el torcazo tienes que decir antes: -"Zarpa".
Eso creyó y quiso decir la zorra; solo que para decirlo tuvo que abrir la boca y esto lo aprovechó el torcazo para escapar volando mientras decía:
-El rabo se me escapa.
Y colorín colorado, este cuento casi ha acabado. Allí se quedó la zorra mirando, hambrienta, engañada, sin paloma ni palomino ni torcazo. Y es que,... afortunadamente... las zorras no saben aún volar, pues si volasen, este cuento sería de otra manera y acabaría de otro modo. Y colorado colorin, llego el fin.
domingo, 14 de marzo de 2010
viernes, 5 de marzo de 2010
Adivinanzas en danza
Con cama al completo,
no es feroz león,
siempre muy discreto
y gusta del Sol.
2.
Llevo nombre santo,
de santo Santón;
casi llego a rama
con preposición.
3.
Con “P” comienza mi nombre,
con “O” se llega al final,
dos “ERRES” van de la mano.
¿Encontrarán la vocal?
4.
Por el suelo
voy despacio,
por el agua voy mejor.
La casa llevo conmigo
y no soy un caracol.
5.
Vuelo por el aire,
corro por el suelo,
no perdí la “Z”
pues siempre la llevo;
cuando vamos varias
siempre la perdemos.
Caso tan curioso…
¿Vos podéis creerlo?
6.
Soy pastor
y, sin ovejas,
por la calle
me verás;
mis raíces,
extranjeras.
No soy árbol,
sí alemán.
7.
Por llorón me tienen,
pues lágrimas tengo.
Verde en primavera,
desnudo en invierno.
8.
Col muy sola se sentía
y al campo un día se marchó.
Flor sí quiso ser su amiga
y juntas viven las dos.
9.
Soy lago sin serlo,
vuelo sin cesar,
plumas yo no tengo,
de pico: ¡Ni hablar!
Aunque yo esté en Murcia,
de Murcia no soy,
pero casi a Murcia
mi lago le doy.
¿Qué soy?
10.
Río siempre
a cada instante.
Río y no puedo parar.
Río siempre
hacia delante,
río siempre
hacia atrás.
Aunque río,
no sonrío,
pues no puedo
sonreír.
No tengo boca
y engullo
todo lo que viene a mí.
11.
Siempre soy Sol
al principio
y no lo puedo evitar;
luego dado
pequeñito
con quien tú puedes jugar.
12.
Luciente farola
de dama vestida.
Alumbra de noche
se apaga de día.
13.
Blanca soy,
de blanco visto
y no me gusta el calor;
vengo toda silenciosa
y ruidosa marcho yo.
14.
Un árbol me tiene
y el hombre también.
¿Qué es?
15.
Dama soy y boina llevo
y, aunque soy bello, sabrás,
que el fin de mi nombre está
y escrito queda:
—Leedlo.
16.
Verde niña,
roja joven,
negra anciana.
De espinas acompañada.
17.
Oro tengo aunque no tenga,
pendo la casa en lo alto;
muy redonda hago la puerta
y de un lado a otro volando.
18.
Es taba, no hueso.
Su nombre está impreso.
19.
Soy pollo y no tengo plumas.
Más que pollo sí que soy
y muy delicioso estoy
a quien guste de verduras.
20.
¿Qué cosa es
cara y bajo
a la vez?
21.
Soy arroz y no me comes.
Dame la vuelta y verás.
22.
Te lo pongo en la taza,
te lo puedes beber;
si no dices su nombre
no lo puedo creer.
¿Qué es?
23.
Nunca le busques tres pies
porque siempre tendrá cuatro;
si no ves ratones cerca
es que cerca andará un…
24.
¿Qué momia se envuelve en seda
para soñar, anhelante,
despertarse un día cualquiera,
poder volar y posarse?
25.
Aunque “SER” es mi principio,
en “TE” termina mi nombre
y llevo siempre conmigo
el valor de tres catorce.
26.
¿Qué animal
no es lo que parece
y vuela con las cinco vocales?
27.
Mi nombre es “MIL”
y valgo mucho más,
si cuentas lo que valgo
seguro que acertarás.
28.
Cana que no es pelo,
río que no es río.
Descifra este lío.
29.
Tan negras como el carbón
y van siempre en procesión.
30.
A decírtela voy,
pues decírtela quiero.
Te la digo ahora mismo,
te la estoy repitiendo.
31.
Pan era y no es pan.
¿Qué era?
32.
Para llegar a ser metro
antes tendré que ser kilo.
Piensa bien y después dilo.
33.
Tu hermana va
jaleando a las gallinas.
Seguro que te cortas
si no lo adivinas.
34.
Es la musa de la araña,
no se entretiene entre telas.
Si no lo adivinas pronto
te quedarás a dos velas.
35.
A ése cero cinco cero
(utiliza el lapicero)
dale un poquito de miel
y le sabrá muy, muy bien.
Y si quieres tú, preciosa,
ponle la cola al final…
¡No le sienta nada mal!
36.
Tres catorce
por delante del ojo.
Tres catorce
hace: pi, pi.
Tres catorce
por delante del ojo.
No lo vuelvo a repetir.
37.
Entre escama y escamita
esconde una camisita
y, a veces, el ojo irrita.
38.
En la cama me encuentras,
en la cocina también.
La cuchara a mí me lleva
y en el cazo estoy muy bien.
39.
¿Qué animal se vuelve loco por el oro?
40.
Llevo el llanto hasta tus ojos,
el ajo es un gran amigo;
en la ensalada me encuentras
y en el huerto del vecino.
41.
¿Qué título nobiliario
se escribe con “D”?
42.
Llevo el don
detrás del nombre,
soy un caballero blanco.
Algo un tanto misterioso
no deja a mi nombre manco.
43.
¡Qué bien le sienta
a esa “BACA” la “O”!
44.
Casi santa soy de noche
y más que santa de día
y, al ver mi cara tan roja,
a todos doy alegría.
45.
Enseñó la cara
al comer la col
y, al ver la cebolla,
presto la escondió.
46.
Soy pequeño espadachín
que no llego a mosquetero
y, aunque me odias,
te quiero;
me espantas con tu sombrero
y tu sangre tomo al fin.
47.
Vengo del país
de la fantasía;
con asma me ves,
mas nunca de día.
48.
Divisaba el mar
desde la garita
y una hermosa dama
acudió a la cita.
49.
Adivina, adivinata:
¿Qué animal se esconde
en la alpargata?
50.
El SOL me tiene.
La LUNA también.
Las ESTRELLAS,
un par de ellas
y en la TIERRA no se ve.
51.
A veces me pierdo y pienso:
mi vida es algo terrible;
con éste nombre que tengo…
perderme sería imposible.
Fragmento de una imagen de Yesica LaghezzaTexto: Carlos Blanco Sánchez
Imagen: Yesica Laghezza
Más de cincuenta adivinanzas en danza para descubrir sin tardanza. Y si no las descubrís, las soluciones vienen al fin.
http://www.educared.org.ar/enfoco/imaginaria/biblioteca/?p=2272#more-2272
no es feroz león,
siempre muy discreto
y gusta del Sol.
2.
Llevo nombre santo,
de santo Santón;
casi llego a rama
con preposición.
3.
Con “P” comienza mi nombre,
con “O” se llega al final,
dos “ERRES” van de la mano.
¿Encontrarán la vocal?
4.
Por el suelo
voy despacio,
por el agua voy mejor.
La casa llevo conmigo
y no soy un caracol.
5.
Vuelo por el aire,
corro por el suelo,
no perdí la “Z”
pues siempre la llevo;
cuando vamos varias
siempre la perdemos.
Caso tan curioso…
¿Vos podéis creerlo?
6.
Soy pastor
y, sin ovejas,
por la calle
me verás;
mis raíces,
extranjeras.
No soy árbol,
sí alemán.
7.
Por llorón me tienen,
pues lágrimas tengo.
Verde en primavera,
desnudo en invierno.
8.
Col muy sola se sentía
y al campo un día se marchó.
Flor sí quiso ser su amiga
y juntas viven las dos.
9.
Soy lago sin serlo,
vuelo sin cesar,
plumas yo no tengo,
de pico: ¡Ni hablar!
Aunque yo esté en Murcia,
de Murcia no soy,
pero casi a Murcia
mi lago le doy.
¿Qué soy?
10.
Río siempre
a cada instante.
Río y no puedo parar.
Río siempre
hacia delante,
río siempre
hacia atrás.
Aunque río,
no sonrío,
pues no puedo
sonreír.
No tengo boca
y engullo
todo lo que viene a mí.
11.
Siempre soy Sol
al principio
y no lo puedo evitar;
luego dado
pequeñito
con quien tú puedes jugar.
12.
Luciente farola
de dama vestida.
Alumbra de noche
se apaga de día.
13.
Blanca soy,
de blanco visto
y no me gusta el calor;
vengo toda silenciosa
y ruidosa marcho yo.
14.
Un árbol me tiene
y el hombre también.
¿Qué es?
15.
Dama soy y boina llevo
y, aunque soy bello, sabrás,
que el fin de mi nombre está
y escrito queda:
—Leedlo.
16.
Verde niña,
roja joven,
negra anciana.
De espinas acompañada.
17.
Oro tengo aunque no tenga,
pendo la casa en lo alto;
muy redonda hago la puerta
y de un lado a otro volando.
18.
Es taba, no hueso.
Su nombre está impreso.
19.
Soy pollo y no tengo plumas.
Más que pollo sí que soy
y muy delicioso estoy
a quien guste de verduras.
20.
¿Qué cosa es
cara y bajo
a la vez?
21.
Soy arroz y no me comes.
Dame la vuelta y verás.
22.
Te lo pongo en la taza,
te lo puedes beber;
si no dices su nombre
no lo puedo creer.
¿Qué es?
23.
Nunca le busques tres pies
porque siempre tendrá cuatro;
si no ves ratones cerca
es que cerca andará un…
24.
¿Qué momia se envuelve en seda
para soñar, anhelante,
despertarse un día cualquiera,
poder volar y posarse?
25.
Aunque “SER” es mi principio,
en “TE” termina mi nombre
y llevo siempre conmigo
el valor de tres catorce.
26.
¿Qué animal
no es lo que parece
y vuela con las cinco vocales?
27.
Mi nombre es “MIL”
y valgo mucho más,
si cuentas lo que valgo
seguro que acertarás.
28.
Cana que no es pelo,
río que no es río.
Descifra este lío.
29.
Tan negras como el carbón
y van siempre en procesión.
30.
A decírtela voy,
pues decírtela quiero.
Te la digo ahora mismo,
te la estoy repitiendo.
31.
Pan era y no es pan.
¿Qué era?
32.
Para llegar a ser metro
antes tendré que ser kilo.
Piensa bien y después dilo.
33.
Tu hermana va
jaleando a las gallinas.
Seguro que te cortas
si no lo adivinas.
34.
Es la musa de la araña,
no se entretiene entre telas.
Si no lo adivinas pronto
te quedarás a dos velas.
35.
A ése cero cinco cero
(utiliza el lapicero)
dale un poquito de miel
y le sabrá muy, muy bien.
Y si quieres tú, preciosa,
ponle la cola al final…
¡No le sienta nada mal!
36.
Tres catorce
por delante del ojo.
Tres catorce
hace: pi, pi.
Tres catorce
por delante del ojo.
No lo vuelvo a repetir.
37.
Entre escama y escamita
esconde una camisita
y, a veces, el ojo irrita.
38.
En la cama me encuentras,
en la cocina también.
La cuchara a mí me lleva
y en el cazo estoy muy bien.
39.
¿Qué animal se vuelve loco por el oro?
40.
Llevo el llanto hasta tus ojos,
el ajo es un gran amigo;
en la ensalada me encuentras
y en el huerto del vecino.
41.
¿Qué título nobiliario
se escribe con “D”?
42.
Llevo el don
detrás del nombre,
soy un caballero blanco.
Algo un tanto misterioso
no deja a mi nombre manco.
43.
¡Qué bien le sienta
a esa “BACA” la “O”!
44.
Casi santa soy de noche
y más que santa de día
y, al ver mi cara tan roja,
a todos doy alegría.
45.
Enseñó la cara
al comer la col
y, al ver la cebolla,
presto la escondió.
46.
Soy pequeño espadachín
que no llego a mosquetero
y, aunque me odias,
te quiero;
me espantas con tu sombrero
y tu sangre tomo al fin.
47.
Vengo del país
de la fantasía;
con asma me ves,
mas nunca de día.
48.
Divisaba el mar
desde la garita
y una hermosa dama
acudió a la cita.
49.
Adivina, adivinata:
¿Qué animal se esconde
en la alpargata?
50.
El SOL me tiene.
La LUNA también.
Las ESTRELLAS,
un par de ellas
y en la TIERRA no se ve.
51.
A veces me pierdo y pienso:
mi vida es algo terrible;
con éste nombre que tengo…
perderme sería imposible.
Fragmento de una imagen de Yesica LaghezzaTexto: Carlos Blanco Sánchez
Imagen: Yesica Laghezza
Más de cincuenta adivinanzas en danza para descubrir sin tardanza. Y si no las descubrís, las soluciones vienen al fin.
http://www.educared.org.ar/enfoco/imaginaria/biblioteca/?p=2272#more-2272
Doña Blanca Leche, la de la nevera,
Doña Blanca Leche,
la de la nevera,
muy vitaminada
leche de primera,
se quiere casar
con hombre moreno,
de enorme prestigio
y de olor muy bueno.
Ha puesto un anuncio
dentro del mercado
buscando ese novio
que tanto ha soñado.
La llamaron muchos
buenos pretendientes
y, a ninguno quiso,
la muy exigente.
Vino en la mañana
el novio añorado,
un chico moreno,
negrito, tostado.
Los dos se casaron
dentro de un tazón
y café con leche
es la invitación.
Se vino a la boda
el pan orgulloso,
jugo de naranja
y un huevo curioso.
Se vistió de crema
Doña Mantequilla
y la mermelada
llevó su sombrilla.
Y en esta boda
de café con leche
se fueron juntando
todos, uno a uno,
en esa bandeja
de mi desayuno.
http://www.educared.org.ar/enfoco/imaginaria/biblioteca/?p=444
Texto: Zandra Montañés Carreño
Imagen: Hebe Gardes
domingo, 21 de febrero de 2010
Razas espaciales
por Ollala Cernuda
Ilustraciones: Luis Parejo
No todos los viajeros espaciales son iguales. Como en casi todo, aquí también hay categorías. La definición de la Real Academia de astronauta es "tripulante de una astronave", aunque si el viajero es procedente de la antigua Unión Soviética recibe el nombre de cosmonauta, o taikonauta si viene de China. Sin embargo, las distintas razas espaciales no sólo se diferencian por el nombre. Pinche en las imágenes para saber más de cada uno.
http://www.elmundo.es/documentos/2003/10/ciencia/cervantes/razas.html
miércoles, 6 de enero de 2010
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